domingo, 25 de septiembre de 2011

CUATRO CONSEJOS EFICACES

4 consejos eficacez contra el enojo

1. ABRAZAR NUESTRO ENOJO: El maestro budista vietnamita, Thich Nhat Hanh, propone que lo primero que debemos hacer al enojarnos es reconocerlo; saber que estamos enfadados, molestos o irritados.Abrazar nuestro enojo o frustración es el primer paso para transformarlo. Para lograrlo, toma el tiempo que necesites; hazlo mientras estés sentado o sal a caminar por unos minutos, prestándole toda tu atención.
2. DESACTIVAR NUESTROS DISPARADORES: El segundo paso es darnos cuenta de que, si miramos nuestra mente con mayor atención, en muchas ocasiones lo que lo dispara son nuestras propias tendencias o hábitos, nuestras fibras sensibles.Con tu mente calma, recuerda algún evento de enojo. Mira en retrospectiva la situación y pregúntate: si no existiera en mí la tendencia de enojarme, ¿cómo podría hacerlo?
3. LA MENTE ES LA FUENTE DE LA FELICIDAD Y DEL DOLOR: Recuerda una situación perturbadora en tu vida. Observa, sin juzgar, lo que estabas pensando y sintiendo. Examina cómo tus actos y actitudes fueron los que crearon la percepción y la experiencia que tuviste así cómo tu actitud afectó lo que dijiste e hiciste.Piensa de qué otra manera podrías haber percibido la situación y cómo la nueva perspectiva hubiera cambiado tu experiencia. Date unos momentos para descansar tu mente y determínate a estar atento y analizar la manera en la que interpretas las cosas que te suceden. Genera la intención de ver las cosas desde una perspectiva más amplia.
4. TRANSFORMANDO LA CRÍTICA: Examina si es verdadero o falso lo que otra persona dice de ti. Lo importante es el contenido, no la forma en la que lo dice. Si lo que dice es cierto: Ten en cuenta que tu propósito es mejorar tu vida. Esa persona, con su crítica, te está señalando algún error, por lo tanto, es bondadosa al ayudarte a ver con claridad tus defectos.


*TALLER DE DANZAS DE APPEMO.MINSA 2011 FEB.

EL ROBLE

EL ROBLE COMO EJEMPLO BASTA

El roble ha sido considerado como un árbol sagrado para muchos pueblos de la antigüedad. Para ciertas zonas europeas fue considerado símbolo de la materia, pues su madera servía como alimento del fuego, es decir, del espíritu. Se pensaba que las maderas carbonizadas que se utilizaban en ceremonias, al igual que los robles alcanzados por el rayo, tenían propiedades especiales y actuaban como talismanes capaces de ahuyentar los rayos producidos por la naturaleza y atraer la buena suerte. El roble es uno de esos árboles sagrados que conseguía reunir en torno a él a los habitantes de un pueblo o ciudad para celebrar sus asambleas. En la zona norte de España, concretamente en la región vasca, se solían celebrar reuniones al abrigo de un roble. Así, este árbol se convirtió en un símbolo de paz y de libertad, ya que se administraba justicia bajo el roble sagrado.
La literatura nos proporciona ejemplos muy interesantes sobre la estrecha relación entre el roble y la figura del rey. Un ejemplo claro lo muestra Frazer en su libro "La rama dorada", donde se narra una leyenda que dice que en Aricia, Italia, un sacerdote, esposo de la diosa Diana, vivía en el bosque junto a un roble sagrado y que éste recibía el título de rey del bosque. Cuenta, además, que para acceder al trono y después conservarlo, tenía que luchar a muerte con sus adversarios.
La mitología finlandesa, afirma que los robles fueron creados por su dios Vainamoinen, con el fin de dar sombra y cobijar a los pájaros. Según algunos estudios, la palabra “roble” y “puerta” se designan bajo un mismo vocablo en diferentes lenguas indoeuropeas. Según Robert Graves, el Dios Jano es el protector de esta puerta.

 La flor de este árbol es una de las 38 flores del Sistema de Curación, ya que ayuda a tomar conciencia de los límites y las posibilidades de rendimiento y resistencia del individuo, sin por ello abandonar su espíritu de lucha ni sus proyectos. Asimismo, es beneficioso en situaciones de estrés por agotamiento, en contracturas de hombros y cuello por exceso de trabajo. En general es bueno para todas aquellas personas que creen que “siempre pueden más” y que continuamente se exigen a sí mismas más de lo que sus fuerzas pueden soportar.
 En fitoterapia se utiliza la corteza del roble, que tiene propiedades astringentes, antisépticas, antiinflamatorias y hemostáticas, gracias a su riqueza en taninos y flavonoides.
 El roble es un árbol muy resistente que no sólo es valorado por sus propiedades terapeúticas, sino también por su fuerte madera que es resistente a la descomposición y es utilizada en la construcción, pero sobretodo en la fabricación de muebles.


“PODEMOS VER AL ROBLE COMO  IMAGEN DE FORTALEZA Y BELLEZA ADEMAS DE ESPECIE SAGRADA “


EN ESTE MES DE LA JUVENTUD, DE RENACIMIENTO
DRA. YUPARI